Verano 2006

La conoció una noche de verano. Las estrellas brillaban mas Que cualquier otro dia.El las estaba observando a todas y cada una de ellas con na dulzura inusual en la mirada. sumido totalmente en sus pensamientos, simplemente esperando. una pelota naranja rozo sus piies y levantó la vista, ella, venía hacia él, corriendo, un perro la seguia casi a la misma velocidad de ella. La luz de la luna iluminó toda su cara tostada, que mostró una bella sonrisa. Su pelo, totalmente suelto, se movia segun al viento se le antojaba tapando con cierta gracia parte de su cara.Se acercó a él. Se disculpó por si su perro le había molestado, a lo que él, muy seguro de si mismo, contestó que no importaba. Ella se despidió, y tras retirarse el pelo de la frente,le tiró la pelota al perro. Justo cuando ya comenzaba de nuevo a correr, él le dijo:-“Te he estado esperando.”Ella se volvió, y, sonriente, le preguntó si se refería a ella.-“Sí, he venido hoy a la playa, porque pensaba que hoy te encontraría. Bueno, no. A ti en concreto, no. No te conozco. Pero sabía que hoy iba a pasar algo bueno, y... Estoy delante tuyo. No sabría explicártelo, era una intuición, un presentimiento.”

A todo esto, la chica se había acercado nuevamente, y le sonreía.-“Desde pequeño he tenido esas especies de corazonadas, y he seguido la mayoria de ellas. Pero hoy, sentía que era especial, era un impulso que me ha hecho llegar hasta aquí, hasta ti. Y puede parecerte banal, o extraño, o incluso sacado de alguna película romántica, pero... Creo que tú eres mi alma gemela.”Ella lo miró seriamente, sin dejar de sonreír. Mucha gente había intentado conocerla más, pero era la primera vez que alguien lo hacia de esas maneras en la playa. La situación le parecía divertida.. Le dijo que le quedaban unos cuantos metros más para terminar de correr aquella tarde, un ir y volver hasta la punta de la playa, si él continuaba allí cuando ella volviera, podían ir a tomarse un batido a uno de los chiringuitos que cerraban tarde.-“He esperado toda una vida para estar contigo, podré aguantar unos minutos más.”Le sonrió, y tras dar media vuelta siguió corriendo, pensando en aquel encuentro. Él, mientras tanto, se sentó en la arena, viendo como se alejaba no la mujer mas bella que habiia visto, pero si la que habia aparecido en su vida sin que la buscara.